miércoles, 24 de octubre de 2012

Let´s play ball

De la mano de la trillada frase “no hay fecha que no llegue y plazo que no se cumpla”, arranca la Serie Mundial de las Grandes Ligas entre dos equipos que jamás se habían enfrentado en estas instancias; los invitados al clásico de Otoño, los Tigres de Detroit y los Gigantes de San Francisco.

Los Tigres de Detroit fueron los primeros en llegar a la Serie Mundial, después de dejar fuera en la Serie de Campeonato de la Liga Americana a los Yankees de Nueva York, quienes nuevamente se quedaron lejos de acceder a la final de los playoffs de la MLB al ser literalmente barridos por Verlander uno de los máximos referentes del pitcheo de la Americana quien junto a Miguel Cabrera, Prince Fielder  y Delmon Young buscarán el campeonato por quinta ocasión, mismo que obtuvieron en 1984 por última vez.
Los de Detroit han tenido que esperar para poder conocer a su rival,  por lo que la emoción generada tras ganar la serie 4 a 0 ante Nueva York no ha disminuido ya que han tenido el tiempo necesario para recargar pilas y poder enfrentar a unos Gigantes que vienen con la adrenalina al mil generada por la calificación a la Serie Mundial.

San Francisco en cambio llega calientito a la Serie Mundial,  de manera contundente venció a los actuales campeones los Cardenales de San Luis, en un séptimo y decisivo juego; mismo que encuadro con una lluvia que cayó en el momento exacto para enmarcar el momento en el que los Gigantes volvían dos años después a tener nuevamente la oportunidad de repetir el campeonato del 2010.

El primer juego de la serie será en casa de los de San Francisco, quienes a un solo día de conocer que estaban dentro de la Serie Mundial ya tenían un “sold out” en el AT&T Park.  Brian Sabean, General Manager de los Gigantes sabe que el rival que enfrentarán no es fácil pero no lo pudo decir mejor que con estas palabras “Mis jugadores son como cucarachas, no se mueren” esto después de remontar ante los Rojos de Cincinnati y de venir abajo 3 a 1 ante los Cardenales.
Es un buen momento para los de Detroit que después de tiempos difíciles económicamente hablando, tienen la posibilidad de dar a su afición la alegría de coronarse y a su vez que la gente pueda voltear a ver a la ciudad como la gran urbe industrial que años atrás fue.

Aparte de lo inédito que embarga la presencia de estos equipos, será una buena Serie Mundial, cargada de eso que solo genera el Clásico de Otoño, la expectativa de saber qué equipo tiene la motivación exacta para ser el nuevo monarca de la MLB. Así que LET´S PLAY BALL.

martes, 16 de octubre de 2012

De cuando la paciencia apremia

Los números de los Redskins hablan poco sobre lo que esta franquicia significa para su afición, el ubicarse en el tercer puesto en la lista de Forbes de los equipos más valiosos de la NFL solo por debajo de los Vaqueros de Dallas y los Patriotas de Nueva Inglaterra no dice tanto de los de Washington; tampoco el haber ganado 2 campeonatos de la NFL, o coronarse en 3 de 5 Super Bowls en los que participaron o el tener en su haber 22 apariciones en playoffs, créanme que estos números no dicen nada sobre la fidelidad que sus aficionados le tienen.




Este domingo pasado ante los Vikingos de Minnesotta, los Redskins terminaron con esa ausencia de victorias en el FedEx Field; solo 391 días tardaron en ganar en su casa, ocho partidos consecutivos sin triunfos que celebrar con su gente, la última vez que su fans tuvieron la oportunidad de sentir la emoción de hacer valer su localia fue en la semana 2 de la Temporada 2011-2012 ante los Cardenales de Arizona.
Pero aún así, los Redskins tienen 9 años siendo la franquicia que mayor asistencia tiene en su estadio; su gente a pesar de las malas rachas que ha enfrentado su equipo, las desilusiones que le generaron en este tiempo sigue al pie del cañón llenando el estadio cada vez que su equipo se presenta en casa.
Paradójicamente a esto se le podrían ver varias vertientes, como un buen proyecto comercial con el cuál tienen aseguradas las entradas al FedEx Field, un buen trabajo de mercadotecnia en el cuál el aficionado se siente parte de o sinceramente el hecho de que el fan sabe que su labor es estar siempre ahí ya sea en los buenos momentos, como en los no tan buenos; en realidad esto fue lo que hicieron a pesar de la tristeza y frustración jamás dejaron de alentar a su equipo como a su vez presionar al rival aunque este fuera quien se llevará la victoria.
 


Por lo pronto los “Skins” le regresaron la confianza a sus aficionados con este triunfo, los números y las estadísticas se quedaron a un lado en el momento en que los 78,476 asistentes al estadio vieron a Robert Griffin III llevar el balón hasta la zona de anotación y consagrar la victoria merecida para todos esos fans.
Como todos los deportes, esta racha que ahora empieza puede ser temporal, su siguiente rival son los Giants de Eli Manning y los Acereros de Pittsburgh lejos de casa, regresaran a Washington (por así decir porque el estadio está en Landover) para enfrentar a las Panteras de Carolina dónde deberán probar que esa estadística de determinados partidos sin ganar con su gente solo fue cosa del pasado; por lo pronto el equipo le devolvió al FedEx Field el sonido de celebración que 13 meses atrás había quedado en mute; esto de mano de la paciencia y de saber que las cosas no cambian de la noche a la mañana.